Recuerdo cuando entré por primera vez a consulta con el Dr. Betances. Estaba nerviosa, deprimida e insegura de mí misma, pero con un gran deseo de liberarme de la obesidad que hacía tan difícil mi existencia. Luego de escuchar al doctor explicarme todo el procedimiento bariátrico, decidí ser valiente y hacer lo que tenía que hacer para salvar mi vida. No me puedo quejar del trato recibido en el hospital antes y después de la operación. El doctor Betances junto a su equipo siempre disponible a contestar cualquier pregunta. Recuerdo la primera mañana después de la cirugía, el doctor me sorprendió con su visita bien tempranito pues a él le gusta ver personalmente a sus pacientes. La primera semana post op fue lo peor pero después de ahí mi vida solo ha hecho mejorar. Agradecida eternamente, primero a Dios, y luego al Dr. Betances: instrumento de Dios para bendición de miles.